¿Qué es una arritmia?
Tener una arritmia puede suponer que el latido del corazón es irregular o que el corazón late más lento (bradicardia) o más rápido (taquicardia) de lo normal. Las arritmias son más frecuentes en personas mayores pero también pueden aparecer en niños.
Antes de profundizar en cada tipo de arritmia, es muy importante conocer si la arritmia tiene una causa conocida:
- En muchos casos, la arritmia ocurre debido solo a una anomalía “eléctrica” y el resto del corazón es completamente normal. En estos casos, solemos decir que la arritmia ocurre en una persona que “no tiene cardiopatía estructural “, esto es muy frecuente en niños y en jóvenes.
- Esta causa, puede ser una alteración detectable en los análisis: por ejemplo, anemia o hipertiroidismo. Por ello, en la evaluación global de un paciente con arritmias, se suele realizar analítica para estar seguro que no existe ninguna alteración corregible que sea la causa de la arritmia. En casos más concretos, los análisis pueden incluir un estudio genético detallado, cuando se sospecha que la arritmia se debe a una alteración congénita o pueda tener una implicación familiar.
- En algunos casos, la causa puede ser una anomalía en la estructura del corazón (por ejemplo un infarto de miocardio previo). Cualquier anomalía que se produzca en las paredes, en las válvulas o en las arterias del corazón (las arterias coronarias) puede conllevar afectación del sistema eléctrico. Por eso cuando se estudia el corazón se realizan otras pruebas como el ecocardiograma, la resonancia magnética, el TAC o incluso cateterismo con el fin de encontrar anomalías que justifiquen las arritmias.